El primer vino de hielo en Ribera del Duero

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Así nació el primer vino de hielo en Ribera del Duero

Habrás escuchado hablar de los famosos vinos de hielo elaborados con uvas congeladas en países como Alemania y Canadá.

Son vinos dulces con un sabor y unas cualidades muy valoradas por los aficionados al vino. Y se llaman así porque provienen de la fermentación del mosto resultante del prensado de las uvas con un punto de congelación de entre -8 y -11 grados.

El carácter inquieto e innovador que tenemos en Bodegas Vetusta nos llevó a explorar la posibilidad de elaborar un vino dulce natural, sin ningún tipo de azúcar añadido, de gran calidad y singularidad.

Para ello se hacía imprescindible conseguir uvas con un alto grado de azúcar. Y de forma natural solo hay 3 métodos para concentrar los azúcares de la uva: por desecación, por podredumbre noble o por congelación.

Nos decidimos por la congelación y es así como nació el primer vino de hielo en la Ribera del Duero, VETUSTA Tempranillo de hielo, un vino muy exclusivo que cualquier aficionado al vino debería probar porque, además de estar riquísimo, es un vino realmente único.

Déjame que te cuente por qué deberías probar nuestro Vetusta Tempranillo de Hielo y cómo hemos elaborado este vino para que sea tan especial e innovador.

 

Por qué VETUSTA Tempranillo de hielo es tan especial

 

Entre otros motivos, este vino es tan especial porque es el primer vino de hielo que se hace en Ribera del Duero, nadie antes lo había hecho en esta zona.

Pero otra cosa que hace singular nuestro vino de hielo es que usamos uva 100% Tempranillo de gran calidad de nuestros viñedos ecológicos situados en las zonas más altas de la Ribera del Duero.

Para elaborar nuestro vino de hielo necesitamos usar muchas más uvas de las que usamos para elaborar nuestros vinos tintos porque el rendimiento de kilogramos a litros es bajísimo, en torno al 20%, cuando en el vino normal es de un 70%.

Para que te hagas una idea, con 2.000 kg obtenemos tan solo 400 botellas. Y eso, lógicamente, frena a cualquier viticultor si lo que busca es optimizar el rendimiento de cada kilo de uva que produzcan sus tierras.

Como te decía anteriormente, concentramos los azúcares de la uva por congelación, un método poco común y muy arriesgado, en nuestro afán de aprender cosas nuevas  y experimentar con las uvas procedentes del cultivo ecológico de nuestros propios viñedos.

Ten en cuenta que, a esa temperatura, toda el agua intracelular de la uva está congelada. Y, por tanto, al prensar se obtiene un mosto superconcentrado, con un alto grado de azúcar obtenido de manera natural. Como dato curioso, te diré que ese mosto tarda en fermentar unos 3 meses.

Pero lo que de verdad hace único este vino es que no pretende parecerse a los vinos de hielo de otras zonas del mundo. Sino que, partiendo de unas técnicas de elaboración que ellos utilizan, hemos logrado producir un vino diferente e innovador que, en todo momento, trae recuerdos de la uva tempranillo de Ribera del Duero y de nuestro terruño.

Sin ningún tipo de duda, para mi como viticultor, el VETUSTA Tempranillo de Hielo es un sueño hecho realidad. Una forma muy especial de expresar lo que deseo lograr y transmitir con los vinos VETUSTA.

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